DISECCIÓN DE GATO. SISTEMAS Y APARATOS DE UN MAMÍFERO COMO NOSOTROS

Hola a todos.

Hoy os invito a ver unas imágenes preciosas de cómo es un mamífero, como nosotros, por dentro. No es obligatorio verlas si no te apetece, soy consciente de que el concepto de "precioso" es algo subjetivo. En mi subjetividad de profesor de Biología, un ser vivo por dentro es alucinante, perfecto (cuando funciona bien, claro) y, además, precioso por lo que representa.

La característica principal del ser vivo es precisamente esa, la vida, pero en su ausencia aparece su contrario que es la muerte. Este otro proceso no nos suele gustar tanto a los seres vivos, pero en Biología eso es algo natural y necesario, nos guste o no. Seguramente ha sido el miedo a la muerte la que ha llevado a muchos humanos a buscar otras formas de interpretar el mundo.

El caso es que esta semana hemos tenido la oportunidad, que debía ser aprovechada, de realizar la disección a un gato. Fue el lunes a primera hora cuando me llegan unos alumnos y me dicen: "Profe, mira lo que te hemos traído. A ver si lo haces con nosotros a tercera hora." Mi sorpresa al mirar dentro de la bolsa fue inmediata: "Pero, ¿para qué cogéis esto?". El gato había fallecido recientemente, porque no olía y unos segundos después mis neuronas realizaron unas conexiones más correctas para un profesor de ciencias: "Dame eso".

El resultado lo podéis observar en las siguientes secuencias de imágenes.



La disección se realizó con 2ºA en cuyo curso está uno de los alumnos que me lo habían traído. La rabia es no haber tenido clase con 2ºB y 4ºESO, de ahí también la importancia de colgar las fotografías para que ellos puedan hacerse una idea de lo allí tratado. Pudimos determinar que había muerto de algún impacto que le había provocado que se le reventase el hígado y los pulmones, es decir, lesiones incompatibles con la vida. También comprobamos que estaba castrado, o sea que era macho y seguramente tenía o tuvo dueño.

Con 3ºESO se realizó a primera hora del día, pero estaban invitados, los que quisieran, a venir durante el recreo a verlo más despacito. Cinco de ellos se pusieron las batas que trajo Nacho (nos las habían donado) y tuvieron sus guantes de látex para poder tocarlo. También pudieron extraerle el contenido del estómago. Encontramos un pescadito y legumbres a medio digerir. ¡Uy, qué gato más pijo! O sea que tiene dueño. Las siguientes fotos son durante el recreo:



Y, finalmente, gracias a los profesores que daban a 4ª hora a 3º y 4º de Diversificación, estos alumnos pudieron también aprovechar esta buenísima oportunidad. Estos alumnos ya tienen experiencia conmigo del curso pasado en el que diseccionamos un lucio y una cabeza de ciervo. Además, aquí estaba el otro alumno que me lo había traído. Con ellos ya se podía extraer cualquier órgano para verlo, ya que no iba a ser posible continuar con ningún otro curso. El resultado es el que véis:



¿Por qué les cojo a los alumnos estos animales muertos?

1. Porque un criterio de evaluación de mis asignaturas, con todos los cursos de ESO, es el de "Realizar correctamente experiencias de laboratorio, respetando las normas de seguridad".
2. Porque una norma de seguridad es que, si huele, no se disecciona. Si no huele es como cuando tocas la carne, pollo, pescado, etc. que has comprado para comer.
3. Porque en mi asignatura, si se trabaja con ejemplares naturales, se gana el triple. En una sóla clase se pueden ver, prácticamente, todos los órganos, aparatos y sistemas de un mamífero que es prácticamente igual que nosotros por dentro. Ya hicieron con todos nosotros lo del libro y cuaderno, sin pisar un laboratorio nunca. Mi intención como profesor de Biología y Geología es que eso no le vuelva a suceder a un alumno mío. Yo pisé un laboratorio, por primera vez, en 1º de carrera.
4. Porque los recursos son caros de conseguir, en tiempo y dinero. Por eso hay que aprovechar todo recurso que te venga solito al cole.
5. Porque mis alumnos me conocen y saben que lo voy a aprovechar. A ellos, por supuesto, les encanta. Saben que están ganando mucho más.

En fin, por todo esto justifico esta práctica. Por cierto, fue un éxito.